Apenas arribado a Halle este lunes, el español Rafael Nadal, ganador el domingo de su noveno título en la tierra batida de Roland Garros, saltó a las pistas para entrenarse sobre césped sin perder tiempo, apuntando a llegar aceitado a Wimbledon, su próximo desafío grande.

"Me alegro de haber venido aquí", declaró el número uno mundial, quien sin perder tiempo se puso a practicar en hierba de cara al torneo ATP de Halle, aperitivo y puesta a punto de muchos tenistas para el Grand Slam de Wimbledon.

Tras hacerse la foto de rutina, el mallorquín inmediatamente pidió a los organizadores si podía entrenarse "una media hora", solicitud que el director del certamen respondió con una afirmación.

Después de cambiarse, Nadal se fue a las pistas de entrenamiento con su técnico Francisco Roig, aunque antes, de pasada, se tomó su tiempo para firmar autógrafos a todos los chicos que se le pidieron en su camino al court.

Baja el año pasado, el jugador de los 14 títulos 'grandes' ha tenido la primera ronda libre, debido a su condición de primer preclasificado, al igual que Roger Federer (N.2), defensor de la corona alemana que ha ganado también en otras cinco oportunidades.

Rafa entrará en liza en la hierba de Halle el jueves, cuando le toque enfrentar al alemán Dustin Brown, número 85 mundial. En caso de éxito, el número uno mundial festejará su triunfo número 700 en el circuito, por solo 135 derrotas.