Los valores morales y educacionales que impone el gobierno cubano a su población son escudados con diferentes métodos de propaganda comunista, enfatizando en sus tres valuartes.Educacion, Salud Y Deportes.

Difiero de la cacareada Educación Gratuita en Cuba por mi personal experiencia y por el criterio, de muchos mas, que como yo, han visto, y ven frenados sus verdaderos sueños de una formación vocacional acorde a sus intereses personales y no conforme a las imposiciones, de un sistema que ha gobernado, muy astutamente, el destino personal de millones de seres humanos.

Desde que eres niño no recibes otra orientación que un lema comunista en alusión al culto de personalidad de un ensombrecido hombre : Pioneros por el Comunismo Seremos como El Che:´

Con este lema en labios los niños cubanos comienzan su sistema educacional con solo 5 años de edad, sin saber que es el Comunismo ni saber quien fue el Che Guevara, pero el lema es impuesto como regla en los matutinos y desfiles a que asisten estos pioneros.

Esos niños, con edades que van desde los 5 hasta los 11 años, van de manera simultanea, semanal, cada dos semanas, o mensual, a trabajar a los huertos escolares, donde recogen hortalizas, limpias de hiervas las mismas y otras laborales acorde a estos cultivos, solo para enseñarles que el hombre nuevo que necesita la patria debe forjarse entre el estudio y el trabajo.

Una ves concluida la enseñanza primaria se inician en la Secundaria Básica con dos posibilidades: Quedarte en una de las muy pocas Secundarias Urbanas que existen en las grandes ciudades o, ir becado en una de las llamadas Escuelas Secundarias Básicas en el Campo, verdaderos antros de maltratos, mala alimentación, prostitución y explotación de esos niños-jóvenes.

En estas Escuelas en el Campo tienes que hacer trabajo a diario en el sector agrícola sin recibir por ello compensación monetaria alguna, solo el estandarte de que es la vinculación estudio trabajo necesaria para forjar el hombre nuevo.Cada día, esos jóvenes reciben una sección de clases, sea la mañana o la tarde, teniendo que dedicar la sección contraria a realizar dichas labores agrícolas.

Concluida tu Educación Secundaria debes pasar al grado inmediato que corresponde a la educación pre-universitaria, para la cual en Cuba solo existen centros urbanos en la capital, Ciudad de La Habana y muy contados, el resto de los planteles que imparten este tipo de educación están en áreas urbanas con el ya mencionado régimen de estudio - trabajo.

Es decir, si deseas y sueñas realizar un estudio universitario debes pasar el pre-universitario en el campo con una jornada laboral diaria sin recibir remuneración por ello ya que es el método de formación del llamado hombre nuevo.

Puede que en el momento de concluir tus estudios pre-universitarios seas el primero en la escala de evaluaciones en tu escuela y ello te permita pedir y obtener la carrera que deseas estudiar, pero lo común y bien general es que esos alumnos que concluyen el nivel pre-universitario encuentren un listado de carreras a estudiar asignadas a su escuela, entre las cuales no esta la que el anhela, o sencillamente solo asignaron una plaza de la especialidad que el sueña y por no ser un alumno de 100 pero si de 98 no puede optar ya que otro de mayor puntuación, pero tal ves con menos vocación, la obtuvo.

Concluido el otorgamiento de las plazas asignadas comienza la asignación de carreras, por ejemplo, un numero determinado estudiara para maestros pues los necesitamos y otro numero serán médicos para cubrir los compromisos internacionales que mantienen la falsa imagen de la llamada revolución.

Así encontraras miles de jóvenes haciendo de maestros sin vocación, sin ánimos, sin motivaciones y otros miles haciendo de médicos, instructores de arte, etc con iguales condiciones.

Si valoramos el costo de este sistema educacional en la vida de un hombre desde su niñez hasta el momento de obtener un titulo universitario, es muy fácil comprender y darnos cuenta que no es gratuita la educación en Cuba.

Que esa Educación lleva en si no solo el costo del trabajo gratuito que realizas en tus años de niñez y juventud, sino el costo de verte enrolado en una especialidad que jamas amaste, para la que nunca tuviste vocación y con la que tendrás no obstante de arrastrar a tus espaldas y vivir de ella para el resto de tu vida por alimentar el ego, la jactancia, la mentira y la locura de un sistema totalitario que contra la lógica y muy penosamente pretenden algunos seguir como ejemplo en nuestro continente latinoamericano.