El centrocampista camerunés Patrick Ekeng, fallecido tras un paro cardíaco el pasado viernes mientras disputaba un partido en Bucarest, sufría de "serios problemas cardíacos", según los primeros datos de la autopsia revelados este miércoles.

El futbolista del Dínamo de Bucarest sufría de cardiomegalia (un corazón más voluminoso de lo normal), resultado de una hipertrofia en el ventrículo izquierdo, y presentaba varias anomalías coronarias, indicó el instituto médico legal de Bucarest en un comunicado.

"Tenía problemas cardíacos serios", declaró el médico forense Abdo Salem a la agencia de prensa rumana Agerpres.

El futbolista de 26 años, que disputaba su primera temporada en el Dínamo, entró al terreno de juego el pasado 7 de mayo contra el Viitorul Constanta, y siete minutos después cayó desfallecido sin que los intentos por reanimarle surtieran efecto.

El jugador había pasado diferentes exámenes médicos en enero de 2016 en el Instituto Nacional de Medicina Deportiva, que no revelaron nada anormal. "Todos sus análisis fueron adecuados", y mostraban que el jugador estaba apto para la práctica de un deporte de alto nivel, indicaron fuentes médicas.

El informe final de la autopsia será publicado tras los resultados de los exámenes toxicológicos, que se conocerán en dos semanas.

El Dínamo de Bucarest decidió retirar el dorsal 14 de sus camisetas, que portaba Ekeng. El club, que disputará la final de la Copa de Rumanía el martes ante el Cluj, prometió en caso de victoria donar el trofeo a la familia del jugador.